Demuestra gratitud, así se titula el siguiente capítulo que mencionaré del libro de Randy Pausch, La última lección. En el Randy cuenta cómo poco tiempo después de obtener el puesto de profesor titular llevó a todo su equipo de investigación a Disneylandia como agradecimiento. Agradecimiento? Si, ellos habían sido parte importante de su logro, así que se merecían un buen agradecimiento. Randy termina el capítulo con una frase: "Salgan y hagan por otras personas lo mismo que alguien haya hecho por ustedes".
En el trabajo por lo general pensamos que la gente que trabaja para nosotros esta suficientemente remunerada, y pocas veces agradecemos el empeño que ellos ponen en su trabajo, pocas veces recompensamos a la gente de manera adecuada por haber hecho juntos que la empresa (y por tanto uno mismo) haya llegado a un punto importante, entregado un producto que ha tomado mucho tiempo, o haber tenido un año con buenas utilidades. Tendemos a pensar que lo establecido en la ley, la gratificación y el porcentaje de utilidades es suficiente. Pues no, deberíamos hacer mucho más, mostrar gratitud, cercanía, tener detalles con el personal que los hagan sentir parte de un objetivo común. No por tenerlos contentos, sino por agradecimiento por su tiempo, dedicación y esfuerzo.
El siguiente capítulo se titula "Envía galletas", y narra una estrategia que Randy solía utilizar cuando debía supervisar que otros profesores que leyeran y revisaran publicaciones de investigación. Junto con cada artículo enviaba al profesor una caja de galletas con una nota que decía "Gracias por acceder a revisar esta información. Las galletas son tu premio. Pero no se vale que te las comas antes de revisar las publicaciones." Esta estrategia, cuenta Randy, solía provocar una sonrisa en sus colegas, y así nunca tuvo que acosar a nadie. Y cuando tenía que enviar un recordatorio solo era necesario decir "Ya comiste las galletas?".
Ofrecer una recompensa sencilla por una labor tediosa es una buena forma de empezar, sobretodo cuando es sabido que la tarea encargada causará desgano en el responsable. Y hacerle seguimiento a estas tareas es con frecuencia más tedioso aún, causando muchas veces peleas sin sentido. El empezar las cosas de una manera positiva puede darnos mucho mejores resultados que el presionar y dar una recompensa posterior. A veces las relaciones ya se rompieron como para recuperarlas con una muestra de gratitud posterior.
22 abr 2009
La cuestión es cómo vivir tu vida (4)
Publicadas por Fernando Gutierrez a la/s 4/22/2009 10:30:00 p.m.
Etiquetas: la última lección, life, randy pausch
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2 comentarios:
100% de acuerdo con lo del agradecimiento mas alla del sueldo... y no lo digo por la empresa sino POR OTRA (ya sabes tu cual) que hasta ahora no reconoce la labor sacrificada de sus trabajadores (que colera grrr)
Que paja todo lo que cuentas del libro de Randy porque es muy motivador y te da pautas a seguir para llevar una vida más placentera pero también productiva.. Es cierto el trabajo duro recompensa, y el viernes lo comprobé : )
Gracias por ponerlo en tu blog
Saludos,
Margie
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