Deja que señalen tus errores

Decidí empezar con un capítulo del libro que contiene la frase que más me interesó desde la primera vez que vi el video de la Ultima Lección de Randy Pausch. Es parte de lo que vendría a ser la primera parte de su libro y de su exposición también. La narración de cómo se dedicó a cumplir con sus sueños de la infancia, cómo algunos los conquistó y en otros falló, pero sacando grandes lecciones. Precisamente este capítulo tiene que ver con uno de los sueños que no pudo cumplir, jugar en la NFL.

Narra Randy cómo conoció al entrenador Jim Graham, y cómo en el primer día de entrenamiento no llevó ningún balón ante el desconcierto de los integrantes del equipo. Cuando le preguntaron al entrenador éste respondió indicando que si en un juego de futbol hay 22 jugadores y un sólo balón eso quiere decir que sólo uno lo tiene por jugada, por lo que ellos trabajarían en lo que hacen los otros 21 jugadores. Les dio fundamentos, y eso es algo que a mucha gente, en muchos aspectos, les hace falta.

Recuerdo muy bien que en mis primeros ciclos en universidad me tocó llevar un primer curso de programación, la primera mitad, o tal vez todo el curso se desarrolló en pizarra y papel, incluso los examenes requerían "programar" rutinas y algoritmos con lapiz y papel. En ese momento me pareció ridículo, pero hoy veo que esos ejercicios de pura imaginación nos enseñaron (a los que lo aprovechamos) a pensar en las mejores opciones antes de lanzarnos a programar directo la primera solución que se nos ocurriera (Borrar y corregir en papel es mucho mas tedioso que usar el replace de un editor de texto). Además nos enseñó a respetar sintaxis de manera más estricta, a ser mas selectivos en el nombre de variables y rutinas y sobretodo a tener claros los conceptos que estabamos aplicando. Ahora que como empleador me ha tocado ver código de distintas personas, la mayoría postulantes a posiciones de programación, he podido constatar que justamente muchas personas carecen de criterios básicos y que resultan en desorden e ineficiencias.

La segunda parte del capítulo se centra en la frase que comentaba al principio. Narra Randy cómo un día el entrenador fue especialmente duro con él, al finalizar la práctica uno de los asistentes del entrenador observó que el entrenador había sido muy duro con el, a lo que Randy respondió con un si. El asistente entonces le dijo: "Eso es bueno, cuando cometes errores y nadie te los indica, significa que ya se han dado por vencidos contigo".

Es dificil de aceptar, pero muchas veces los críticos más ácidos, aquellos que uno cree son los más pesados, son en realidad los que más interesados están en uno. Además hoy que está de moda la autoestima existe una muy buena manera de brindarla, dale alguna tarea a alguien que sabes que no pueda hacer, luego ayudalos a hacerla y esa meta cumplida alimentará su autoestima.

El capitulo finaliza indicando que hay mucho de aprendizaje de "finta" involucrado en la disciplina del deporte, cuando uno envía a sus hijos a aprender a jugar futbol, basket, natación, muchas veces no lo hace por el deporte en sí, ni por el ejercicio físico, sino porque es una manera interesante y "fintosa" de hacer que los niños aprendan algo de perseverancia y trabajo duro, la habilidad de entrentarse a la adversidad.

En mi niñez fui a varias academias deportivas de distinta índole, y siendo el deporte un tema especialmente escabroso para mi aprendí mucho sobre perserverancia, no destaqué en completamente ningun deporte, salvo alguna competencia pequeña de natación y el campeonato en el intercachimbos realmente nunca fui un ganador, pero aprendí a llevar mis limites un poco más alla de lo que actualmente están, a superarme de a pocos y darme cuenta que en realidad, si trabajaba en algo, era altamente probable que finalmente lo lograra completar. Todos tenemos la habilidad necesaria para casi cualquier propósito, solo se requiere de constancia, perseverancia y de aceptar las críticas que vengan en el camino.